La Cruroplastia ayuda a eliminar el exceso de tejido flácido producido por la pérdida de peso en la cara interna de las piernas. Descubre cómo se hace
La reducción de peso excesivo puede causar que la piel de los muslos tenga un aspecto flácido y arrugado. Esta es una situación incómoda, puesto que al hacer el movimiento para caminar, este exceso se frota causando irritación. La cruroplastia es una posible solución para este problema.
El lifting de los muslos o cruroplastia, es el rediseño de la parte interna superior de las piernas mediante un proceso quirúrgico que consiste en retirar el exceso de tejido. A menudo, se complementa con liposucción para moldear y darle un aspecto liso a las extremidades inferiores.
Este procedimiento es ideal para crear una apariencia más delgada y definida en la parte inferior del cuerpo.
¿Cómo se lleva a cabo la Cruroplastia?
Debido a que se debe eliminar tejido con la cruroplastia se requiere de anestesia general. El tiempo de duración del procedimiento es de aproximadamente 3 horas. Aunque puede variar dependiendo de la complejidad que presente cada paciente.
La dimensión de la incisión se realizará según la proporción de piel a retirar. De hecho, antes de poner en marcha la cirugía, el especialista delimita con un marcador el área a trabajar. Las cicatrices quedan escondidas en la posición neutra de la pierna, es decir, en la cara interna de la misma.
Al cabo de 10 días es necesario que asista a una consulta para retirar los puntos de sutura y verificar que el tejido se encuentre en perfecto estado. En este periodo de tiempo es probable que no pueda ver los resultados con claridad, debido a la inflamación de los muslos. Sin embargo, es factible que note que la piel esté más tersa.
Postoperatorio
Después de haberse realizado la cruroplastia es necesario que tenga presente algunas recomendaciones: como por ejemplo: no exponerse al sol, evitar el ejercicio por al menos unos meses, guardar reposo, no subir escaleras o hacer algún movimiento brusco. Así mismo, pasadas dos semanas podrá regresar a su rutina diaria.
¿Cuáles son los riesgos?
La cruroplastia es un procedimiento bastante seguro y el mayor riesgo que puede correr es tener piernas delgadas y moldeadas. Por otra parte, para reducir las eventualidades propias de una cirugía es recomendable que el paciente no ingiera bebidas alcohólicas, ni fume, por lo menos 2 semanas antes de la misma.
¿Qué beneficio trae al paciente?
Tener piel de sobra entre los muslos puede afectar tanto física como mentalmente a las personas que han perdido grandes cantidades de peso. Es un recordatorio constante de la obesidad, de hecho algunos manifiestan que esta piel es un ancla que los retiene en el pasado y que no está acorde con su imagen. Psicológicamente, se libera al paciente a esta atadura mental que le impide cumplir con el objetivo de verse bien.
Si considera que su salud mental y física es adecuada y quiere someterse a algún cambio a través de una cruroplastia u otra cirugía estética, para sentirse mejor contigo mismo, consulte con su médico.
En conclusión, la cruroplastia es más que un simple procedimiento para moldear las piernas. Sería, más bien, la oportunidad de dejar atrás esos kilos demás y empezar una nueva etapa de una vida saludable.
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Dra. Valentina Escalona
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